Agencia La Oreja Que Piensa. Argentina 2011. Por David Scler
La del maestro Daniel Barenboin es considerada una de las mejores batutas orquestales hoy por hoy del planeta y, por si fuera poco, este argentino es un firme candidato al Premio Nobel de la Paz.
Barenboin nació en Buenos Aires el 15 de noviembre de 1942 en viejo barrio de Villa Crespo, junto a otro grande de nuestra música, el maestro también con mayúsculas el gran Osvaldo Pugliese
es iniciado en la música, si es que se lo puede llamar así por la influencia de sus padres, músicos también, siendo sus primeros maestros en su ya larga trayectoria.
Su madre es la que le brinda sus primeros conocimientos pianísticos, continuando con su padre, la incipiente carrera de pianista y director de orquesta.
Dotado de una condición natural se manifiesta ya a los pocos años con su debut en agosto del año 1950, interpretando su primer concierto en Buenos Aires con tan solo 7 años.
En el año 1952 la familia BARENBOIM se traslada a ISRAEL donde más tarde obtendrá la nacionalidad por su expreso pedido.
Sus padres lo envían a Salzburgo a estudiar composición con IGOR MARKEVITCH, durante aquel verano conoce al director WILHEM FURTWÄNGLER para quien toca el piano, haciendo este elogios del joven pianista, y que el joven responde con una profunda admiración que BARENBOIM le mantiene y que se deja entrever por el estilo que muestra en las ejecuciones de sus obras. Otros de los estudios realizados son los de armonía y composición con NADIA BOULANGER en París.
Su debut como pianista se produce en es Mozarteum de Salzburgo, Austria en 1952, en Paris ese mismo año en Londres, en 1956, y en Nueva Cork en 1957 bajo la batuta de Leopold Stokowski, sucediéndose conciertos regulares por Europa Estados Unidos Sudamérica y el Lejano Oriente.
Debuta como director de la orquesta Filarmónica de Londres en 1967 recibiendo posteriormente numerosas invitaciones de diferentes orquestas tanto europeas como americanas. En junio de ese mismo año contrae matrimonio con la notable cellista Jacqueline du Pre cuya carrera se ve truncada trágicamente ya que contrae una esclerosis multiple, Baremboim debido a la enfermedad de su esposa se instala en París y establece una relación artística con la pianista Elena Bashkirova, lamentablemente la enfermedad de su esposa termina trágicamente, falleciendo esta el 19 de Octubre de l987 a la edad de 42 años.
Posteriormente Daniel Bareboim contrae matrimonio con la pianista Elena Bashkirova y de la cual tienen dos hijos.
Debuta como director de Opera en 1973 con la ópera Don Giovanni de Mozart en el festival de Edimburgo.
En 1981 debuta en Bayreuth, lógicamente en un festival dedicado a Wagner. Dirige regularmente en esa ciudad hasta 1999, destacándose la lectura del Anillo de lo Nibelungos y Tristán e Isolda
En septiembre del 2001 solicita la nacionalidad española que le es concedida.
Es director de la orquesta Sinfónica de Chicago desde 1991. hasta junio del 2006 en reemplazo de Sir Georg Solti.
Hay una labor destacada de la cual hay que hacer mención y es el titánico esfuerzo que realiza por la paz a través de la creación de la orquesta árabe israelí y que fomenta la paz entre los dos pueblos y de la cual es su principal mentor.
Esta orquesta es de reciente creación y está realizando numerosos esfuerzos anuales reuniendo cada vez a jóvenes tanto árabes como israelíes para lograr una paz en medio oriente mediante un lenguaje común a ambos.
También es de destacar que le es concedida la ciudadanía palestina debido a esa labor que realiza a favor de la paz entre los pueblos y que sirva como ejemplo para las nuevas generaciones
LA WEST EASTERN DIVAN ORQUESTA
He aquí la razón fundamental por la que está postulado al premio nobel de la paz. Junto al filósofo palestino Edward Said, crean este proyecto, capaz de unir en un solo organismo, a jóvenes israelíes y palestinos que muestran al mundo que se pueden unir voluntades en aras de la paz.
Este organismo, puede demostrarle al mundo que se pueden proyectar intereses comunes, para ambos países a través de la experiencia de colaborar en dichos intereses.
Este organismo ha demostrado una y otra vez que la música puede romper las barreras que los hombres no pudieron lograr y que antes se consideraban insalvables, a través del trabajo de la orquesta, demuestra que los puentes que se pueden construir para animar a la gente para escuchar el uno al otro.
La música por si sola, por si misma puede, por supuesto, no resolver el conflicto, pero deja sentadas las bases para poder hacerlo.
La música concede al individuo el derecho y la obligación de expresarse y por otro lado, escuchar al prójimo, con esta base y esta noción de igualdad cooperación y justicia la orquesta representa un modelo alternativo a la actual situación en medio oriente.
Dicha orquesta, se reúne, todos los años en Sevilla que es el lugar natural que le destinaron a través de su fundación, ya que se financia a través de una subvención de la Junta de Andalucía que la promueve