Agencia La Oreja Que Piensa. Por Nuria Barbosa León. http://www.granma.cu/mundo/2018-07-31/cuba-cura-el-dolor-de-los-guatemaltecos-31-07-2018-13-07-17
Una brigada médica de más de veinte cooperantes de la Isla asiste las 24 horas del día a los damnificados de la tragedia provocada en ese país centroamericano por las violentas erupciones del Volcán de Fuego.
LA ayuda a los más necesitados vuelve a entregarse por parte de la brigada médica cubana en Guatemala, quienes socorrieron a las víctimas de la erupción del Volcán de Fuego, ocurrida el 3 de junio en la localidad de Escuintla.
La tragedia afectó a más de 1.7 millones de guatemaltecos, con más de cien fallecidos y casi 200 desaparecidos. Muchas familias perdieron prácticamente todos sus bienes y persisten en la búsqueda de sus seres queridos, aun cuando concluyeron las labores de rescate por parte de las autoridades locales.
Así lo describió el doctor Yuri Rafael Batista Varela, coordinador nacional de los médicos cubanos a través de un mensaje de correo electrónico a Granma Internacional y agregó que en el lugar laboran 26 de sus colaboradores para asistir a los damnificados.
Los sobrevivientes a la tragedia se encuentran alojados en albergues con condiciones difíciles por el hacinamiento, la higiene en los locales y la organización necesaria para este tipo de eventualidad, pero no les ha faltado la ayuda solidaria por parte de los trabajadores de la salud provenientes de la Isla caribeña.
Esos médicos se movilizaron inmediatamente de ocurrida la desgracia, cubriendo la guardia durante las 24 horas del día y realizando acciones para mejorar la situación de insalubridad presentada. Ellos viven también en albergues y realizaron un pesquisaje epidemiológico, acometiendo medidas con el propósito de evitar brotes de afecciones diarreicas, de la piel y respiratorias.
«Comenzamos a dispensarizar a las personas con patologías crónicas no transmisibles y a los evacuados con síntomas de algún padecimiento. Continúan las acciones de promoción de salud para disminuir los factores de riesgos de contraer enfermedades. Las condiciones de vida de nuestros colaboradores son las necesarias para la realización de su trabajo con calidad», destacó el doctor cubano, residente en la ciudad de Santa Clara y trabajador del Hospital Provincial Pediátrico Universitario José Luis Miranda.
El también especialista de Primer Grado en Ortopedia y Traumatología reconoció la vocación altruista de todos los miembros de la brigada, quienes brindaron su disposición para prestar ayuda en la zona afectada, principalmente los pediatras, epidemiólogos y los especializados en Medicina General Integral.
La presencia de los 431 trabajadores de la salud provenientes de la Mayor de las Antillas en la tierra del Quetzal data del 5 de noviembre de 1998. Ellos llegaron para ayudar a las víctimas causadas por el huracán Mitch y laboran en 16 de los 22 departamentos del país, principalmente en los sitios alejados de las grandes urbes y de difícil acceso.
Además, se implementó la Operación Milagro, que devolvió la visión a miles de pacientes guatemaltecos. Recordemos que esta iniciativa surgió en el año 2004 por acuerdo entre los presidentes de Cuba Fidel Castro y de Venezuela Hugo Chávez para propiciar la intervención quirúrgica oftalmológica.
Ante la erupción del Volcán de Fuego, se sumaron otros 39 cooperantes, miembros del Contingente Henry Reeve especializado en situaciones de desastres y graves epidemias, constituido el 19 de septiembre del 2005 por el líder de la Revolución Fidel Castro, para apoyar a los damnificados por el huracán Katrina en Estados Unidos, ayuda no aceptada por el gobierno de ese país.
El Jefe de la Misión Médica cubana en la nación centroamericana destacó la presencia de jóvenes egresado de la Escuela Latinoamericana de Medicina de La Habana, incluidos los de El Salvador y Honduras, que prontamente se movilizaron.
También resaltó la labor del embajador cubano Carlos de Céspedes Piedra, quien visita con frecuencia Escuintla y se muestra preocupado por la organización del trabajo para garantizar los servicios de salud, recorriendo los albergues donde se encuentran los evacuados, recogiendo testimonios de personas afectadas y realizando un intenso trabajo en las redes sociales para la divulgación de esta realidad.
Además, el médico antillano significó la ayuda del doctor guatemalteco Ricardo Arriaza, quien trabaja muy unido a los cubanos y ha demostrado sensibilidad por su pueblo y deseos de resolver tan lamentable situación por la que atraviesan. Igualmente agradeció al Obispo de la Iglesia Mormona y miembros del Club Rotario de Escuintla por garantizar toda la logística de condiciones de vida y alojamiento de los galenos de la Mayor de las Antillas.
«Una vez más quedan demostrado los valores que enaltecen a nuestro pueblo y el altruismo de ese Ejercito de Batas Blancas, en cualquier lugar del mundo. Continuaremos llevando salud a los que menos posibilidades tienen y los más necesitados de acceder a los servicios médicos», aseveró en su mensaje el médico cubano.